River, por la recuperación en Rosario
Torneo de Primera División
Visita a Newell’s a las 20. El equipo de Gallardo no gana de visitante desde la segunda fecha y viene de dos empates seguidos. Lo transmite Telefe.
Marcelo Gallardo, el sábado, al llegar a la concentración en Rosario. (Juan José García)
“Si nosotros vamos a jugar a que River juegue, será un problema. Estamos hablando de un equipo de jerarquía. No le podemos dar la pelota”. La frase la pronunció Diego Osella cuando se lo consultó por la clave de un choque que, a priori, parece tener mucho en juego. Es que Newell’s necesita reencontrarse con el triunfo para no perder terreno en los puestos de vanguardia. No lo hace desde aquel agónico éxito en el clásico (luego empató con San Lorenzo y perdió con Racing). Y River tiene escaso margen de error si pretende cumplir con su objetivo de campeonar.
El encuentro se disputará a las 20, con arbitraje de Silvio Trucco y transmisión de Telefe.
Newell’s contará con la vuelta de Ignacio Scocco, su as de espadas. Volverá a pisar el área tras un lesión en el nervio ciático que lo dejó afuera en los últimos partidos. El punto más flaco parece estar en la mitad de la cancha. Osella se quedó sin sus dos volantes centrales preferidos. No jugarán Diego Mateo ni Facundo Quignon, ambos lesionados.
Las bajas también afectan a River. Ante la falta de defensores centrales y con Jonathan Maidana entre algodones, Marcelo Gallardo decidió recurrir a las Inferiores. Le dará la oportunidad al juvenil Lucas Martínez Quarta, de 20 años, quien hará su estreno oficial con la camiseta de River. El DT volverá a apelar al sistema 4-2-2-2, con Mayada ocupando el puesto de lateral izquierdo. También ingresará Joaquín Arzura en lugar del suspendido Ponzio.
Pero la atención también va a estar puesta en lo que ocurra en las tribunas y en las inmediaciones del Parque Independencia. Newell´s volverá a jugar en casa luego de el gravísimo atentado que sufrió el vicepresidente segundo Cristián D’Amico, a quien le balearon el auto cuando se trasladaba junto a su hijo de 10 años. El presidente Eduardo Bermúdez pidió: “Que la gente vaya tranquila a la cancha que tenemos el apoyo total del Ministerio de Seguridad. El problema no es el domingo, sino el lunes cuando nosotros andamos en la calle”.
La preocupación por la escalada de violencia es mayúscula. Motivos sobran. La reorganización de la barra abrió un nuevo escenario en la vida social e institucional de Newell’s. El fuego cruzado alcanza ahora a los dirigentes, en la mira por la firme decisión de no ceder ante ninguna extorsión. El ministerio de Seguridad de Santa Fe solicitó adelantar el horario para jugar de día. El pedido no prosperó. Habrá 420 policías y un despliegue de agentes que se iniciará a las 13, siete horas antes del encuentro.
La máxima alerta está puesta en el corazón de la tribuna, pese a que la feroz interna por controlar el paraavalancha parece haber llegado a su fin. Los rumores que bajan de la popular cuentan el pacto entre tres de los principales grupos que se disputaban el poder, ahora repartido entre los laderos de Diego “Panadero” Ochoa (líder hasta abril), los viejos caciques que respondían a Roberto “Pimpi” Camino” (ex jefe asesinado en 2010) y soldaditos de “Los Monos”, la banda narco de la ciudad.
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Source: Deportes
