«Tengo un metro de agua adentro de mi casa y nadie vino a dar la cara», decía una vecina indignada. Desde las 17 varias decenas de vecinos arrojaron un tronco sobre la ruta 19 y cortaron toda forma de circulación sobre dicha vía. Nadie pasó durante varias horas. El pedido de los vecinos era el de una bomba extractora para sacar el agua que todavía permanecía estancada en las calles de Frontera y Acapulco a una altura de unos 40 centímetros.
Recién cerca de las 22 las cosas se calmaron cuando aparecieron algunas maquinas de la Municiaplidad de Frontera para trabajar en el sector. Sin embargo los vecinos sólo habilitaron una mano hasta ver que realmente se realizaba la tarea.
Varios de kilómetros con vehículos parados, en su mayoría camiones, debieron soportar horas de espera para circular. A esto se sumaron algunos delincuentes que aprovecharon que los conductores no se podían mover para realizar algunos robos menores, según denunciaron transportistas presentes.
Fuente: El Periodico de San Francisco
