Un desglosamiento que el Centro de Investigaciones Participativas en Políticas Económicas y Sociales (Cippes) realizó de la Encuesta Permanente de Hogares que el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) dio a conocer tiempo atrás, generó preocupantes datos en cuanto a la situación en la que viven niños y adolescentes en la provincia de Córdoba.
Pese a marcar que existen “diferencias con otros centros de características similares”, el gobierno no dejó de asumir los hechos, dando a conocer que ya tiene en marcha “estudios propios” asociados a condiciones socio-económicas en las que vive la población.
Particularmente, el estudio del Cippes dejó en claro que el 56% de esa franja etaria vive en condiciones de pobreza, representando un total de quinientos cincuenta mil chicos. El directivo Alfredo Schlarek Crutchet remarcó además que el quince por ciento es indigente, por lo que están “malnutridos o desnutridos”.
“Estamos pidiendo la emergencia infantil en la provincia. Los datos son muy duros y graves. Si esto no lo comenzamos a resolver, se va a ir empeorando a futuro. Se tiene que tomar nota de la situación, no se puede mirar para otro lado. Hay que rever políticas educativas, de salud y social, entre otras”, dijo.
A su vez, el ministro de Desarrollo Social, Sergio Tocalli, confirmó que son necesarios informes propios “que sirvan como soporte” a cada uno de los programas de políticas públicas. Dijo que no discute los números ni quiere cotejarlos, pero marcó diferencias.
“Lo importante de mediciones es que tengan con el paso del tiempo una misma matriz. Nosotros estamos volcando más recursos a lo social que otras provincias, pero la Encuesta Permanente de Hogares, por ejemplo, no mide los aportes no dinerarios, como el Paicor, la Copa de Leche o las Salas Cuna. Eso no se refleja en estadísticas” remarcó durante la entrevista con radio Universidad.
