A fines de los sesenta y principios de los setenta, Vietnam y la agitación social hicieron que empezara una nueva época de las películas de terror en Estados Unidos; poco tiempo después del principio del nuevo siglo, tuvimos una atrocidad pública masiva y varias nuevas guerras para disparar toda una nueva ola de películas que tratan sobre ansiedades comunitarias a través de monstruos y súper freaks maníacos. Sí, siempre fue un género perdurable, más allá de lo que ocurriera en la cultura, pero considerando lo que pasó globalmente en los últimos 16 años, tiene sentido que las películas de terror hayan resonado en la gente como lo hicieron. Eso, y el hecho de que un temor generalizado haya producido una cantidad de películas, tanto en Estados Unidos como en otros países, que merecen un lugar en el panteón.
Así que armamos nuestra mirada sobre las 50 mejores películas del siglo XXI -historias de zombies y apocalipsis, historias de fantasmas que se meten en nuestra psique, películas de terror retro, joyas de neo-giallo, terror japonés, terror coreano, extremismo francés y franquicias hollywoodenses que nos asustaron, nos shockearon y nos hicieron cagar en las patas desde el año 2000. Como en todo proceso liderado por un comité, nuestros obstinados escritores y expertos discutieron acerca de lo que debía incluirse y clasificaba para entrar aquí. (Mulholland Drive tiene que estar en cualquier lista de las Mejores Películas del Milenio; si es o no una película de «terror», sin embargo, es materia de debate). Pero las películas de esta lista te aseguramos que van a dejarte repitiendo: «Es sólo una película. es sólo una película. es sólo una película».
50 No respires (2016)
Tres años después de su primer largometraje, una reversión sorprendentemente buena de Evil Dead, el director Fede Alvarez dirigió y co-escribió el guión de su propio aporte, original y fascinante, al cánon del terror. Un trío de adolescentes intenta robar la casa de un hombre ciego. Es sólo ahí que se enteran del pasado de su víctima: es un pobre veterano del ejército (Stephen Lang, de Avatar), cuya hija falleció y quien, para lidiar con la pérdida, tomó un par de decisiones oscuras en su vida. La situación cambia por completo, y los predadores se vuelven la presa -es abyecta, enroscada, y completamente atrapante. KG
49 Sinister (2012)
Desesperado por realizar un éxito, un escritor de libros de crímenes reales (Ethan Hawke) acepta un proyecto que involucra a un asesino serial; se topa con una caja con rollos de Super-8 en el sótano, y descubre que la casa en la que se está quedando puede ayudarlo en su investigación de la peor manera posible. Este regreso a las buenas películas de terror prohibidas para menores después de una larga serie de thrillers anodinos a mediados de los 2000 fue un golpe en el abdomen, usando un espantoso legado de películas snuff, repugnancia ocultista y vanidad literaria para lograr increíbles efectos de película de terror clásica. ST
48 El juego del miedo 2 (2005)
La primera El juego del miedo, lanzada apenas el año anterior, fue un éxito con un tipo malo llamado Jigsaw listo para transformarse en ícono, de modo que la secuela era prácticamente inevitable. De casualidad, el guionista Darren Lynn Bousman había estado tratando de vender un guión llamado The Desperate que estaba tan cerca de la película de 2004 que la franquicia podía re-utilizarlo con facilidad -y en el proceso, hacer una película mucho mejor que la original. Personajes más fuertes, más pánico, esa estética austera inspirada en el giallo, y Donnie Wahlberg perdiendo la cabeza mientras su hijo batalla contra uno de los juegos del asesino -esta era una El juego del miedo superior en todo sentido. Fue tan exitosa que Bousman dirigió las siguientes dos secuelas. KG
47 La cara del horror (2002)
Si agarrás las mejores partes de tus amigos y las juntás, entonces podés crear el amigo perfecto, ¿no? Eso es literalmente lo que el personaje que da título a May (el nombre original del film) intenta hacer para curar su aplastante soledad. Angela Bettis invoca a su Carrie White interna, despertando empatía a medida que se deteriora el estado mental de su personaje. Con cada rechazo, el público se vuelve más cómplice de su locura, y May mata y descuartiza gente en un intento por lograr lo imposible: encontrar a alguien para tener y retener. Enormes felicitaciones al director Lucky McKee por haber creado un personaje con el que nos identificamos tanto que no queremos otra cosa que su éxito. JV
46 Goodnight Mommy (2014)
Por supuesto, muchos chicos dan miedo desde que nacen, y los gemelos idénticos son, casi sin excepción, conductos del demonio. (Se llama ciencia, gente). Pero los pequeños traviesos de este elegante debut del dúo australiano de Veronika Franz y Severin Fiala son una cosa especial. Cuando mamá empieza a actuar de manera volátil después de una cirugía intensiva, los chicos sospechan que no es la mujer que dice ser -busquen «síndrome de Capgras» en el DSM- así que pasan a interrogarla de manera violenta. Las inusuales armas de los chicos son una prueba de la originalidad de los directores en esta obra novelística de principio a fin: adhesivo Krazy Glue, una ballesta casera, y una escalofriante jarra de cucarachas, por mencionar algunos. No confíes en gemelos. CB
45 [REC] (2007)
España se mete en el reinado de las películas de terror con «imágenes de archivo» (más o menos) con este buen relato sobre una reportera de noticias de la TV (Manuela Velasco) que trabaja en una nota de interés social sobre una estación de bomberos. Se suma a una llamada de rutina que involucra a una mujer mayor atrapada en su departamento; lo que no sabe es que en su futuro también hay una epidemia misteriosa, una cuarentena y un frenesí de contagios. Narrada completamente a través de las grabaciones de un cameraman, la versión que hacen Jaume Belangueró y Paco Plaza de las películas de zombies se toma su tiempo para desplegar la pesadilla, y pisan el acelerador recién en el caótico último acto. Se puede decir que tiene el uso de una niña más efectivo en una película de terror desde La noche de los muertos vivos. DF
44 El destino final (2000)
Por supuesto, los adolescentes ya han escapado de homicidas maníacos con máscaras de hockey y de imparables máquinas de matar -pero ¿qué pasa cuando tienen que enfrentar a la Parca? Habiendo escapado de un accidente aéreo, un estudiante de escuela secundaria (Devon Sawa) y varios otros pasajeros descubren de primera mano que a la Muerte no le gusta que la engañen -y como dice uno de los personajes: «no te conviene joder al Gran Señor». Esta franquicia subió la apuesta de las muertes «accidentales» barrocas acumulando entradas como: ¡Montañas rusas desbocadas! ¡Ascensores que decapitan! ¡Camas solares que queman! Pero su primera entrega sigue siendo escalofriantemente profética, inaugurando una década que se caracterizaría por ejemplos reales de actos de violencia horrorosos y azarosos a gran escala. DF
43 El amanecer de los muertos (2004)
Tanto el director Zack Snyder (Watchmen) como el escritor James Gunn (Guardianes de la galaxia) pasarían al estrellato con películas de superhéroes. Pero esta reversión improbable que hizo el dúo de la obra maestra sagrada de George A. Romero sobre unos zombies en el shopping desafiara todo lo que sabés acerca de la moda de remakes de películas de terror, muchas veces de mala calidad. Hay que darle crédito a la primera escena de la película, un tremendo espectáculo de terror ascendente, en la que el apocalipsis llega al barrio suburbano de Sarah Polley; son 10 minutos de los más aterradores en la historia del subgénero. Y si eso no te dio el suficiente miedo, termina con una secuencia de títulos que usa «The Man Comes Around», la canción de Johnny Cash que cita la Biblia, para intensificar la sensación de Armagedón. Bravo. STC
42 Actividad paranormal (2007)
Engendró cinco secuelas y varias parodias, pero ni el tiempo ni las imitaciones disminuyeron el miedo que provoca el debut directorial de Oren Pelli. Inicialmente lanzada en 2007 (aunque sólo recibió una difusión mayor dos años después, en una versión drásticamente alterada), Actividad paranormal le daba nueva vida al concepto de las imágenes encontradas, haciendo que su historia de acoso demoníaco ocurriera no en una ubicación obviamente aterradora como en El proyecto Blair Witch, sino mejor en los agradables confines de una casa en el sur de California. Nunca el chasquido inesperado de una luz en el pasillo fue tan desconcertante. DE
41 American Psycho (2000)
Basado en la controversial, muchas veces repulsiva, novela sobre un asesino serial en una sátira de los excesos de la época de Reagan escrita por Bret Easton Ellis, la adaptación de Mary Harron de la saga de Patrick Bateman, el psicópata de Wall Street, ubica la fuente del subtexto feminista del texto acerca de la objetivación y el consumo, y la saca a la luz. Mitad pastiche de Tom Cruise, mitad Norman Bates yuppie, la actuación de Bale como el personaje del título fue un ícono instantáneo, con frases para citar eternamente («¿Te gusta Huey Lewis and the News?»). Pero la secuencia que mejor representa a la película no tiene ningún diálogo: Bateman corre por los pasillos de su edificio de departamentos, desnudo, con la excepción de una motosierra estratégicamente colocada -la cual después deja caer sobre la cabeza de una mujer que escapaba, mientras suelta un aullido victorioso desagradable y sin sentido. STC
40 12 horas para sobrevivir (2014)
La primera película de Purge (título original) tomaba una idea genial -un feriado obligatorio por parte del gobierno en el que todos los actos violentos son legales desde el crepúsculo hasta el amanecer- y armaba un thriller tenso sobre la invasión de un hogar a partir del concepto de su premisa. La secuela de James DeMonaco abandona el caos generalizado y lo transforma en un modelo más lúdico estilo Grand Theft Auto, añadiendo otra capa de comentario social, y regalándonos un nuevo héroe para el género en el personaje vengativo de Frank Grillo. Sabiamente, sin embargo, no se olvidó de los sustos que te hacen decir «oh, mierda», y terminó haciendo una secuela mejor que la original y que expande el universo de la película, al tiempo que tampoco se olvida de los miedos primitivos de los tipos con máscaras horrendas. DF
39 La llamada (2002)
Un fantasma mujer con pelo largo y negro, el miedo latente grotesco en los rostros de aquellos a los que acecha, videos caseros -la remake de Gore Verbinski de Ringu, la influyente película de terror japonesa traslada la historia de Tokio a Seattle, pero la canción (y, más importante, el horror) es la misma. Empieza a circular una cinta de VHS que mata a quien la ve, a los siete días de haberla visto. Más rápido de lo que tardás en decir «leyenda urbana», empiezan a apilarse cuerpos y un espíritu enojado sale de una televisión. Rara vez una remake americana de una película de terror extranjera capturó tan bien el espíritu de la original. SZ
38 Session 9 (2001)
Durante más de un siglo, el Danvers State Hospital de Massachusetts fue un infierno para los pacientes mentales, un lugar donde se hacían horribles experimentos y se cometían abusos inenarrables. Ahora son todos edificios de departamentos (sin dudas encantados), pero el sadismo vive en la pesadilla casera del director Brad Anderson acerca de un grupo de removedores de amianto que revisan los restos del loquero. Borroneando la línea que separa el trastorno de identidad disociativo de la posesión demoníaca, la película usa la estética barata del video digital como una fuente muy efectiva de terror -mucho tiempo antes de que estas nociones pasaran de moda. CB
37 Piraña 3D (2010)
La remake de Alexandre Aja de la película de Joe Dante de 1978 derivada de Tiburón conserva solamente el nombre y los predadores dentados de la original -lo cual es bueno. Al director francés le importa menos volver a hacer aquella peliculita de Corman y estás más interesado en invocar esa antigua mezcla de desnudez copiosa y abundante sangre que caracterizaba el cine de explotación de la época, al tiempo que incorpora un puñado de chistes internos (justo cuando pensabas que era seguro que Richard Dreyfuss volviera al agua…). Pero cualquiera que piense que esto es meramente una tontería debería dirigirse directamente a la escena de una mujer a la que un motor fuera de borda le agarra el pelo. Yo te avisé. DF
36 The Devil’s Rejects (2005)
Aunque es una suerte de secuela de su primer irregular largometraje, House of 1,000 Corpses, esta película retro de Rob Zombie fue un gran salto hacia adelante -un guiño a la crudeza y la tristeza de La masacre de Texas y a la sordidez de los autocines de los 70 que sin embargo dice mucho acerca de las preocupaciones contemporáneas respecto de la tortura y la venganza. La audacia del rockero devenido director de cine da buenos resultados en una escena bizarra en la que se convoca a un crítico de cine por su conocimiento sobre los hermanos Marx, al igual que en un final que contiene el único uso aceptable de «Free Bird» con la excepción de un concierto de Lynyrd Synyrd. ST
35 Ginger Snaps (2000)
Lobizones y feminidad van de la mano en este clásico de clase B canadiense, protagonizado por la reina del terror hip Katharine Isabelle en su papel como una nerd adolescente que se vuelve más sexy y más popular después de que la muerde un canino rugiente. Karen Walton, la guionista, y John Fawcett, el director (quien luego trabajó en Orphan Black, otra pieza de género acerca de la identidad femenina) transforman la historia de Ginger, quien hace poco empezó a ser cool, y su preocupada hermana menor Brigitte, en una comedia negra sanguinaria. No importan los temerarios ataques de los lobos, ni las transformaciones grotescas; esta película trata sobre el terror cotidiano que atraviesan las chicas cuando sus mejores amigas cambian ante sus ojos. NM
34 Casa Vampiro (2014)
Un falso documental sobre vampiros puede parecer algo de corto alcance, pero Taika Waititi, el director neozelandés, y Jemaine Clement, colaborador/co-director/miembro de Flight of the Conchords se la arreglan para hacerla tan hilarante como genuinamente aterradora. La fricción estilo The Real World entre varios muertos-vivos que comparten una casa, incluyendo un vampiro de 8.000 años que recuerda a Nosferatu, es pronunciadamente satírica al tiempo que es extrañamente conmovedora; terminás sintiendo cosas por estas criaturas de la noche, aún cuando tienen que arrancarle la garganta a un pobre tipo para sobrevivir. Bonus: una secuela que se concentra en los tensos lobizones, liderados por Rhys Darby, supuestamente está en camino. SA
33 Una chica regresa sola a casa de noche (2014)
Un debut absolutamente fascinante, la mezcla que hace Ana Lily Armipour de spaghetti western, odas a personajes inadaptados estilo John Hughes, películas de cine-arte en blanco y negro e historias de vampiros definitivamente anunciaba un gran talento nuevo. Pero el hecho de que el terror sea sólo uno de los tantos sabores de la película no diluye ni los encantos ni los sustos; podés dejarte embelesar por la protagonista en busca de sangre de tipo-0 cuando baila con su enamorado en un momento, y después temblar cuando saca los colmillos y se pone furiosa con otra persona un par de escenas después. Pensá en esta película como la Twilight versión punk-rock y girl-power que no sabías que necesitabas. DF
32 Amer (2009)
El debut de los directores belgas Hélène Cattete y Bruno Forzani es una improvisación genial a partir de las películas giallo italianas, y usa los motivos visuales del género -guantes negros, labios rojos, hojas de afeitar- y una estética maravillosamente estridente para mapear la vida de una muchacha llamada Ana en tres actos. Es estilizada, aterradora e irónica en extremo, un caleidoscopio de colores y sobrecarga sensorial. Pero más importantemente, este ejercicio de forma libre agarra una forma asociada con la amenaza masculina y la usa para explorar cómo una mujer se siente cuando está asustada, o excitada, o cuando la asedian. SZ
31 Cloverfield (2008)
El título enigmático, el formato de imágenes encontradas, y el truco de su viralización en internet típicos del productor ejecutivo y co-creador de Lost, J.J. Abrams son lo que llevaron a Cloverfield a ocupar el centro del zeitgeist (y de las taquillas). Pero la película se sostiene en sí misma como quizás la primera película sobre un monstruo gigante desde la Gojira japonesa original que logró transmitir el terror de una criatura de esa escala. El abordaje, que te genera pánico al hacerte sentir que estás ahí, aplicado al ataque de una monstruosidad iracunda a Manhattan -destruyendo puntos emblemáticos, desatando una arremetida de parásitos, e invitando a ataques cada vez más indiscriminados por parte del ejército- encontró el corazón oscuro y desesperado de un género que muchas veces se limitó a versiones camp. STC
30 Cacería macabra (2011)
Este neo-slasher de Adam Wingard revive el terror de «invasión de una casa» de clásicos de los 70 como The Last House on the Left o When A Stranger Calls -sólo que esta vez, en lugar de muchachas adolescentes, es una reunión familiar lo que está amenazada. Hay más sangre aquí de la que podés sacarle a una cabeza herida, pero el humor oscuro del guión y los giros inesperados en la trama la elevan por sobre encima de las típicas películas retro. Y Sharni Vinson es una tremenda heroína de terror. DE
29 Antichrist (2009)
La película se abre con un chico que se cae de una ventana abierta y termina con una horda de mujeres sin rostro marchando ominosamente sobre unos troncos muertos, y esta película de terror psicológico de Lars von Trier exuda inquietud. Pero este retrato de aflicción y desavenencia matrimonial, con Willem Dafoe y Charlotte Gainsbourg, también cuenta con secuencias tan sanguinarias como cualquiera que podés ver en una película de terror convencional. Von Trier da vuelta la vieja premisa de la cabaña en el bosque para narrar el deterioro mental de sus personajes, incluyendo escenas gráficas de penes golpeados y automutilación del clítoris, transformando al sexo en un acto de violencia. Es una película sobre una casa encantada en la que todos los demonios están en las cabezas de nuestros protagonistas. TG
28 Martirio satánico (2008)
Martirio Satánico es una de las películas de terror neo-extremas más extrema -lo cual es bastante-, y esta prueba de resistencia cinematográfica de Pascal Laugier es algo que hay que animarse a ver, incluso para los insensibilizados fans del terror que creen que ya lo vieron todo. Lo que empieza como una búsqueda de venganza contra un grupo de pervertidos burgueses se transforma en un tortuoso ejercicio de sadismo de culto, en el que el dolor de una mujer joven abre la puerta hacia la trascendencia. Es una alegoría dolorosa de la tortura del mundo real o un viaje irreversible al extremo de la explotación. En cualquier caso es inolvidable. ST
27 Los extraños (2008)
Una pareja, una casa en el bosque, un par de invasores enmascarados -elementos clásicos de una película de terror. Pero es un gran ejemplo de por qué muchas veces el estilo importa cuando de lo que se trata es de asustar a la audiencia. Repartiendo suspenso en cuentagotas agónicos, el director Bryan Bertino se toma su tiempo para llegar al clímax, coqueteando con el conflicto entre las víctimas y la amenaza de sus atacantes misteriosos. Los momentos más silenciosos son los más efectivos, construidos sobre la inquietante disonancia de la banda de sonido del dúo Tomandandy y de composiciones que dejan a los personajes malos al costado del plano, envueltos en las sombras. ST
26 Ju-On (The Grudge) (2002)
Si bien Ringu pudo haber inaugurado el terror japonés moderno, no fue la única franquicia -estos relatos escalofriantes de Takashi Shimizu sobre una maldición fantasma que se pega a cualquiera que entre en una casa con una historia de homicidio también hizo que la nueva ola del país llegara a muchos otros territorios. La tercera película de la serie, pero la primera en haber salido en el cine y recibido atención internacional, Ju-On no cambiaba tanto las reglas del subgénero sino que las refinaba, añadiendo un repugnante sentido de gracia a sus escenas de espíritus de cabello negro que reptan. Nunca subestimes el poder de alguien que inesperadamente encuentra una mano en la nuca. DF
25 Trouble Every Day (2001)
La directora francesa Claire Denis dividió a críticos y fans con su incesantemente espantoso relato de amor y canibalismo, con un elenco apropiado de vampiros como Vincent Gallo y Beatrice Dalle en sus papeles de las dos mitades afligidas de dos parejas separadas por «la enfermedad». Aquí es cuando el diagrama de Venn de arte elevado y terror extremo se encuentran en el punto medio, y no vas a encontrar una alegoría más potente sobre el amor como una pasión que te consume. Literalmente. ST
24 Encontré al diablo (2010)
La historia es básica: un agente de los servicios secretos (Lee Byung-hun) va en busca del psicópata (Choi Min-sik, de Oldboy) que asesinó a su mujer embarazada. Se turnan en los roles del gato y el ratón; tortura, violencia gore, cabezas decapitadas, y algunas de las escenas más horripilantes de venganza. La película plantea la pregunta: «¿Cómo hace la gente buena para destruir el mal sin pudrirse también ella?», pero no busca aquí respuestas para esa duda filosófica -este es el tipo de cine asiático de explotación que disfruta de poner el dedo en las heridas. En cuanto al asesino, Choi lo interpreta con una emotividad tan apática que es escalofriante: es la personificación del abismo que te devuelve la mirada. TG
23 Arrástrame al infierno (2009)
El gran Sam Raimi regresó al género después de una larga ausencia con una historia de una bruja legendaria y una heroína nueva (Alison Lohman), a las que luego mete en un circo típico repleto de vómito, hemorragias nasales atómicas, chivos endemoniados y tortas poseídas. Para los fans que extrañaban su estilo de Los Tres Chiflados gore, esto fue como un regalo de los dioses de Fangoria. Para cuando Lohman le dice al cadáver de una anciana: «¡tragátelo, puta!», te das cuenta de que nos están dando la nueva Evil Dead que necesitábamos. SZ
22 Al interior (2002)
Los enfants terribles Julien Maury y Alexandre Bustillo se meten de lleno en la nueva ola de «terror extremo» francés con su esta extraordinaria película slasher. Béatrice Dalle es La Mujer -efectivamente, la versión femenina de Michael Myers, sin la máscara de Shatner ni el overol. Tiene un problema con Sarah (Alysson Paradis), quien está embarazada, sola en Noche Buena, y aterrada durante 82 minutos enteros. Es una fiesta de violencia francesa gore con armas caseras, incluyendo agujas para tejer, una lámpara, Lysol, tijeras y -como bonus- un uso muy creativo de una tostadora. JV
21 Kill List (2011)
Empieza como un drama doméstico escueto y de a poco se transforma en un thriller sobre un asesino a sueldo que va a hacer su último trabajo; el hecho es que esta segunda sorprendente película de Ben Wheatley termina con una espiral descendente al infierno que comprueba la capacidad de este señor de mezclar géneros mientras te atrapa absolutamente. Cuanto menos digamos acerca de cómo llega a ese punto, por supuesto, mejor; lo que podemos decir es que el director hace que el pavor sea parte del ADN de la película desde el comienzo, y que entendés por qué es una película de terror mucho tiempo antes de los créditos del final. SZ
20 The Host (2006)
Ya sabés cómo es: unos científicos descuidados arrojan químicos inestables a una masa de agua cercana y zas, sale un mutante enorme que devora la metrópolis más cercana y a sus indefensos ciudadanos. El camaleón de géneros coreano Bong Joon-ho ofrece su retorcido sentido del humor negro (varias muertes funcionan como remates de chistes) y su aguda capacidad para la sátira social, y construye una película sobre un monstruo gigante para nuestro momento ecológicamente tenso y precariamente inestable. Por no mencionar el hecho de que la película les asigna identidades mucho más formadas a los personajes atacados por la bestia marina que lo que es habitual en el subgénero. Es una suerte de Godzilla de clase-B más graciosa e inteligente. CB
19 La cumbre escarlata (2015)
Guillermo del Toro insistió que la historia de una mujer del siglo XIX que se casa con un hombre de una malhadada familia aristocrática era más «romance gótico» que una película de terror tradicional. Está bien. Pero cuando unos fantasmas sin piel empiezan a reptar por el piso y deambular por las paredes de su mansión derruida mientras amenazan a la pálida novia (Mia Wasikowska), esa distinción parece irrelevante. La alta estilización de la película y el uso de de los colores recuerda a las antiguas películas de Mario Bava y del estudio Hammer, mientras que un elenco de expertos -que incluye a Tom Hiddleston y Jessica Chastain- interpretan la trama macabra de una manera que habría hecho sonreír a Edgar Allan Poe. SA
18 Los otros (2001)
La intensa versión de Nicole Kidman como una madre viuda es la base de este misterio sobrenatural de Alejandro Amenábar, que actualiza el tradicional género de la casa encantada -piensen en The Haunting u Otra vuelta de tuerca- con un giro estilo Sexto sentido. Los sustos son discretos pero inmensamente efectivos, gracias al ritmo onírico de la película y a su atmósfera extraña. (¿Te suena una casa victoriana perdida en el campo?). Amenábar usa su estilo sutil para las pistas y metáforas para advertirnos que no todo es lo que parece, aunque nunca anticipa su sorprendente final. DE
17 Berberian Sound Studio (2012)
Este film británico psicodélico y con influencias de giallo es una película de terror acerca de hacer películas de terror, y su protagonista es Toby Jones en el rol de un experto de efectos de sonido que se vuelve lentamente loco mientras trabaja en una película italiana con un equipo hostil. El guionista y director Peter Strickland mantiene toda la amenaza en la cabeza del protagonista, observando al hombre desaparecer en su propia imaginación paranoica mientras pasa sus días acercándose a los sonidos de puñaladas y gritos de las víctimas. Es un ejercicio inteligente de manipulación del público, poniéndonos incómodos al mostrarnos la falsedad que hay en juego para asustarte -y hacer lo que tenés que hacer. NM
16 Alta tensión (2003)
Esta película de terror francesa sin concesiones es la más brutalmente horrorosa acerca de la invasión a una casa desde The Last House on the Left, y fue raro que la distribuyeran en los Estados Unidos más allá de una calificación de prohibida para menores por contener imágenes de violencia. Pero más allá de las representaciones gráficas de arterias chorreando, decapitaciones y destripamientos, esta película rankea alto haciendo honor a su título y presentando el suficiente suspenso intenso para que no puedas dejar de mirarla. Porque, ¿de qué otra forma sabrías si su protagonista de tamaño duende (¡viva Cécile De France!) va a poder defenderse con un palo con alambre de púa o no? También, cuidado con la sierra eléctrica. KG
15 El orfanato (2007)
La película de J.A. Bayona de 2007 plantea la pregunta: ¿Qué puede ser más terrorífico que la desaparición inexplicada de tu hijo? Su respuesta perturbadora: la posibilidad de que haya amigos invisibles involucrados en ella. Una de esas raras películas de terror que son tan conmovedoras como aterradoras, este thriller sobrenatural aprovecha realmente el ambiente de su título, un edificio gótico ubicado en un lugar desolado de la Costa Verde española; pero es la brillante interpretación de Belén Rueda como la desconsolada madre del niño lo que le da el golpe emocional más duradero a la película. DE
14 Dos hermanas (2003)
El terror japonés era lo último a fines de los noventa y principios de los 2000; la versión de Kim Jee-woon, el director surcoreano, de historias de fantasmas de cabello oscuro probó que el terror coreano podía estar a la altura de sus vecinos al este en cuanto a locura sobrenatural. Unas hermanas sufren una relación de odio-tolerancia con su fría madrastra, mientras la mansión encantada en la que viven no deja de ofrecerles pistas perturbadoras acerca de su pasado en común. Perspectivas de cámara poco convencionales desorientan al público, haciendo que sea aún más impresionante cuando hay apariciones en las sombras. Para cuando la película revela todos sus secretos, una familia disfuncional ya se ha transformado en su propio monstruo. NM
13 Te sigue (2014)
Enfermedades venéreas, embarazos no planificados -en lo que refiere a consecuencias indeseadas del sexo, son todas insignificantes comparadas con, digamos, un espectro imparable que acosa a unos adolescentes juguetones y se transmite de una víctima a otra a través de… bueno, adivinen. Esta mirada revisionista del tropo de la víctima adolescente cachonda típico de las películas de terror estilo slasher está repleto de adornos estilizados (ese paneo de 360 grados es maravilloso), perfectos homenajes a John Carpenter y una sensación genuina de que estás viendo una pesadilla. Jamás perder la virginidad tuvo un costo tan alto. CB
12 The House of the Devil (2009)
Este relato de Ti West, construido lentamente, y que advierte «¡Cuidado con los satanistas!», se ve y se siente como un artefacto de principios de los 80, encontrado en un videoclub abandonado. Una estudiante universitaria ingenua acepta un trabajo de niñera en una ruinosa casa victoriana, trabajando para una pareja de personajes dudosos (interpretados por dos bizarros veteranos de las películas de culto, como Tom Noonan y Mary Woronov). Antes de que todo se vaya literalmente al infierno en el tercer acto, The House of the Devil arma una atmósfera siniestra con un estilo retro -incluyendo una escena con un walkman roto, una canción de The Fixx, y nuestro temor de que todo esté a punto de salir muy mal. NM
11 El espinazo del diablo (2001)
La tercera película de Guillermo del Toro cuenta una historia de fantasmas electrizante y adusta que tiene lugar en un orfanato encantado durante los últimos días de la Guerra Civil Española; fue la película en la que estableció su estilo, y verlo encontrar su propia voz sigue siendo algo estremecedor. Es su película más simple, y sin embargo una de sus más aterradoras, sobre todo porque su visión tradicional de lo sobrenatural se ajusta a la perfección al mundo real. SA
10 Under the Skin (2013)
Le llevó casi una década al director Jonathan Glazer adaptar la novela de una invasión alienígena de Michael Faber, acerca de un extraterrestre que se manifiesta en forma de una humana mujer (específicamente, Scarlett Johansson) y seduce a hombres que hacen dedo para atraparlos, disolverlos y comérselos. Después la criatura realiza un descubrimiento curioso acerca de su identidad sexual en un enorme castillo; para el final, todos lloramos junto al monstruo. En manos de un director inferior, Under the Skin nunca habría logrado una manipulación tan magistral. Pero esta no es una película que vos veas tanto como experimentás. Es como tomar un baño de inmersión en la pesadilla más oscura. JV
9 El descenso (2005)
Años antes de redefinir la TV de acción con su trabajo en Juego de tronos, Neil Marshall, el director británico, se ganó su lugar en el panteón del terror con esta despiadada historia de supervivencia. Un año después de que un accidente de autos destruyera sus vínculos, un grupo de mujeres va a hacer espeleología en una caverna alejada en los Apalaches y descubren mucho más de lo que querían. El ambiente claustrofóbico es intenso y los efectos de las criaturas son genuinamente perturbadores, pero la grandeza de la película consiste en su uso del dolor puro del personaje principal como combustible para la catástrofe que sigue. Pocas de las mejores películas de este género se animan a ir a lugares tan profundos. STC
8 El desesperar de los muertos (2004)
Los fans la consideran una tontería para expertos en películas de zombies, pero no se lo digas al director Edgar Wright: «Nuestros personajes graciosos estaban pasando situaciones muy deprimentes y aterradoras», dijo. «Espero que funcione como una película que acompañe a la trilogía de Romero, más que como una parodia.» Misión cumplida: Shaun mezcla de manera brillante el horror y la comedia de un modo que hace que los sustos sean exponencialmente más efectivos. Esta historia sobre un tipo normal (el co-escritor Simon Pegg) y su extraño mejor amigo (Nick Frost) quienes descubren que los muertos-vivos están atacando a su barrio, tiene una vuelta más, porque sus chistes están constantemente socavados por sus amigos y seres queridos siendo devorados frente a sus ojos. Y pocas películas contienen un destripamiento tan repugnante como en el que un personaje está a punto de disculparse por ser un estúpido -justo cuando aparecen las hordas famélicas y lo rompen en pedazos. TG
7 La bruja (2009)
Una obra maestra de terror atmosférico, esta película de época brillantemente creada por Robert Eggers sigue la caída en la locura y la desesperación por parte de una familia rural de Nueva Inglaterra del siglo XVII que perdió a un bebé en manos de una vieja bruja. Aunque la película contiene algunas secuencias genuinamente aterradoras, gran parte de su sobrecogedora sensación de terror pasa por lo que no se ve en la pantalla, junto con la tensión que inevitablemente ocurre cuando la familia enfrenta su inflexible visión puritana con el poder despiadado de la Madre Naturaleza. Y Black Phillip, el chivo de la familia, va a hacer que no te acerques a ningún zoológico por el resto de tu vida. DE
6 Pulse (2001)
Una polución insidiosa que provoca el suicidio invade el mundo de los vivos a través de Internet en este relato de fantasmas silencioso y apocalíptico de Kiyoshi Kurosawa. De todas las películas de terror japonés de principios de los 2000, Pulse es por lejos la más aterradora y profética -una acusación deprimente a la tecnología y el efecto negativo que sigue teniendo en la humanidad. Aún más impresionante es que el director nunca recurra a trucos baratos, y elija en cambio avanzar a fuego más que lento para sugerir una sociedad que sufre de una podredumbre espiritual, de a un click por vez. Es triste, hermoso y cautivante -una de esas extrañas películas de terror que te dejan una mancha oscura en el alma. JV
5 La cabaña del terror (2012)
La cabaña del terror es la película de terror-meta más subversiva desde que Scream hizo que el género se volviera auto-consciente, y esta enroscada mirada de Drew Goddard acerca del cliché más gastado del cine de terror -unos adolescentes cachondos que se recluyen en una cabaña para tomar drogas y tener sexo- se vuelve algo tan original que Hollywood todavía no supo cómo imitarla y/o arruinarla como hizo, por ejemplo, con El proyecto Blair Witch. Tiene tantas vueltas que es mejor si podés ir con la mente en blanco (o la pizarra en blanco, en este caso. y ya dijimos demasiado). Pero su verdadero logro es ser una extraña película que logra dar miedo y ser graciosa sin volverse chabacana ni cursi en el proceso. Y todo esto, por no mencionar la subtrama del hombre sirena. KG
4 El conjuro (2013)
Muchos directores declaran su lealtad a clásicos del cine de terror como El exorcista; James Wan es uno de los pocos que fue capaz de hacer algo a la altura de sus influencias. Esta historia de fantasmas par excellence toma las mismas fuentes reales que nos dieron The Amityville Horror: a principios de los 70, los investigadores de vida paranormal Ed y Lorraine Warren (Patrick Wilson y Vera Farmiga) visitan a una familia de Rhode Island que cree que su casa está encantada. El conjuro no es solamente una buena recreación de época -es una versión tremendamente eficiente del cine de terror de estudio de los setenta, cuando un ritmo metódico y un tono distante eran más importantes que el gore barato. Un pavor majestuoso y sofisticado penetra en cada encuadre, con Wan jugando endemoniadamente con su público mientras los personajes saltan con cada piso de madera destartalado y con cada visita a ese sótano aterrador. TG
3 The Babadook (2014)
El debut de Jennifer Kent fue no sólo uno de los más firmes en años sino también uno de los más sólidos conceptualmente: no sólo sabe cómo asustar a la gente, sino también por qué. La historia de una madre viuda (Essie Davis) cuyo hijo es amenazado por un demonio anguloso salido literalmente de un libro infantil empieza como una parábola inquietante del dolor; pero se vuelve verdaderamente aterradora cuando el tema pasa a lo rápido que el amor de los padres se puede transformar en odio. Es una película de monstruos en el que todos se turnan para ser el monstruo. SA
2 Let the Right One In (2008)
Hermosa, desalentadora y profundamente conmovedora, esta maravillosa película de Tomas Alfredson de 2008, le dio al género de vampiros una necesaria vuelta de tuerca con su retrato sombrío de una de las relaciones más inusuales en la historia del terror -un niño de 12 años alienado que sin querer se relaciona con la «joven» vampira de al lado. Cargada con la suficiente angustia sueca como para enorgullecer a Ingmar Bergman, y los suficientes sustos como para atraer a los fanáticos del cine de terror, Let the Right One In se mueve despacio y deliberadamente, lo cual hace que sus escenas y secuencias como la masacre en la piscina sean más perturbadoras. Todavía más aterradora, quizás, es la aseveración de la película de que los varones adolescentes tienen la capacidad de ser más monstruosos que los verdaderos monstruos. DE
1 Exterminio (2002)
Como ocurrió con muchas grandes películas de terror, este thriller desgarrador de Danny Boyle nació de los terrores de la vida real. «A Danny le interesaban particularmente asuntos que tuvieran que ver con ira social -la cada vez mayor ira en nuestra sociedad, como en las rutas y en otras cosas», explicó el guionista Alex Garland. De ahí salió 28 Days Later. (título original), en la que un puñado de sobrevivientes (incluyendo a Cillian Murphy y Naomie Harris) intenta mantenerse un paso más adelante de unas hordas imparables de muertos-vivos devastadores, que no sólo se comen a los vivos sino que además parecen estar cargados de una ira insaciable, persiguiendo ferozmente a nuestros héroes con la lógica lunática de una pesadilla. Rodada en MiniDV para enfatizar la fealdad mugrienta y apocalíptica, la película es una maravilla de cámara en mano y montaje nervioso. Pero en las postrimerías de la tragedia del 9/11, esta profética película de terror también habló acerca de ansiedades inconscientes respecto de un mundo en el que las tensiones y la paranoia bullente se han transformado en la terrible nueva normalidad. TG
Textos por Charles Bramesco, Jovanka Vuckovic, Sam Zimmerman, Scott Tobias, Noel Murray, Tim Grierson, Sam Adams, David Fear, Kory Grow, Sean T. Collins, Dan Epstein
Source: Musica