Adrián Cravero sigue luchando por su vida después del balazo a quemarropa que recibió el pasado jueves cuando estaba realizando su trabajo de preventista de Coca Cola y recibió un disparo a quemarropa de parte de dos delincuentes de 14 y 17 años que le robaron la moto.
El domingo por la tarde le realizaron una nueva tomografía mientras continuaba sedado y con respiración asistida.
Según datos proporcionados por familiares directos, ya había recibido seis transfusiones y permnecía estable dentro de un cuadro de gravedad.
La bala le fue extraída después de una intervención quirúrgica de seis horas.
Al menos uno de los delincuentres fue detenido y el otro identificado.
En las redes sociales circulan profusamente la fotografías de estos dos menores.
Fuente: Canal 4